34 minutos

Pues son las 16:38 y estoy en el trabajo. Odio trabajar el finde, lo odio a muerte.
Llevo aquí desde las 10 de la mañana y estoy , sinceramente, hasta las narices de estar aquí metida. Me aburro como una mona, hablo sola, como si hubiera alguien delante mío, tampoco le cuento nada del otro mundo, pero me parece tan ridículo que me doy vergüenza a mi misma.
Lo único bueno que ha pasado hoy ha sido el café que me he tomado después de comer mientras veía Ratatuille. Jamás dejaré el café, es uno de los pocos placeres simples y baratos de la vida, y me da igual que la cafeína sea una mierda y la leche de vaca sea malísima, me da lo mismo.
Hoy para colmo, me he dejado el tabaco en casa, aunque en el curro no suelo fumar. Salgo a veces a la calle a fumarme un piti.. sobre todo si hay muchas nubes y las montañas están bonitas para disfrutar del paisaje, pero poco más. Me podía haber acercado al bar a comprar un paquete de Nobel, pero no me ha dado la gana.
Esta mañana / mediodía, hablé con una persona con la que hacía mucho que no hablaba y la verdad, me apetecía, pero la conversación ha sido del todo frustrante a la par que breve y absurda.
Además, no sé qué tengo ultimamente, pero estoy harta de la comida. Nunca sé qué cocinar, no me apetece nada nunca y sólo pensar qué hacer de comer o cenar es que me pongo enferma. Como le dije el otro día a David, me voy a comprar 5 botes de suero y me lo voy a poner intravenoso por la noche, paso de comer, cocinar o nada que se le parezca. Bueno, menos el café, claro, el café es sagrado. Una ducha y un café, mis únicos placeres cotidianos. De eso se alimenta mi espíritu, de agua caliente y café con leche.
Estos días además, me veo tan horrenda que es que me da igual todo. Hoy, he acabado de despachar a un señor y me ha llamado guapa y bonita... me han dado ganas de arrebatarle la vida con mis propias manos, no me preguntéis por qué.
Me ha gustado Ratatuille, y eso que va de comida, pero la ratilla es tan graciosa, y me ha gustado mucho tb el crítico gastronómico con ojeras :)
He recuperado la chaqueta que me dejé olvidada en el Hotel rural el domingo pasado, menos mal, es la única chaqueta de primavera que tengo que me gusta, creo.
Me duele la espalda de estar aquí sentada, esta mañana he estado colocando un poco la tienda... pero poco, tampoco hay nada que hacer la verdad. Cuando cojo peso se me revelan las contracturas de los hombros y las cervicales y me jode viva ( con perdón ) Así que estoy barajando seriamente la idea de verme otra peli, a ver si se me distrae el cerebro un rato y se me pasa el tiempo algo más rápido.
Tengo que seguir leyendo sobre el tema de la física cuántica, porque ha abierto ante mi un mundo de posibilidades y necesito más información.
Por cierto que ayer, en casa, sentada en mi escritorio, volvió a pasarme eso que me pasa de vez en cuando. Notar a alguien. Y siempre caigo, siempre pienso que me voy a dar la vuelta y me voy a encontrar ahí de pie a David.. pero no hay nadie. Bueno, sí hay alguien, seguro que hay alguien, pero no veo a nadie. Sabéis esa sensación de notar que hay alguien a tu lado, o detrás de tí, o de que alguien pasa detrás tuyo, sentirlo a ciencia cierta, y luego darte la vuelta y no ver a nadie? Pues eso mismo. A veces pienso, que si cierro los ojos y me giro muy despacio voy a ver algo o alguien, pero no me funciona. Tampoco sé si quiero ver algo o a alguien la verdad.
La cosa es que no me pasa muy a menudo y nunca le he dado mayor importancia, pero no se, igual intento centrarme más la próxima vez que me pase.. a ver si saco algo.
Hoy miro mi teléfono cada media hora, por si alguien me ha llamado, o escrito algún mensaje... pero me he ido disolviendo en algunas mentes, supongo que mejor, o eso quiero pensar.
Ya son las 17:09, así a lo tonto han pasado 34 minutos. Podría sin duda seguir escribiendo las primeras chorradas que me pasan por la cabeza hasta las 19:30, pero sería el post más largo y coñazo de la historia.
He oído alguna vez decir que todos estamos solos... pero algunos más que otros.